Y cómo elegir productos que realmente respeten tu piel
La piel de la vulva es una de las zonas más sensibles del cuerpo. Tiene menos capas protectoras y una microbiota propia que cumple un rol clave en la defensa contra irritaciones, infecciones y cambios de pH. Por eso, cualquier cosa que entre en contacto con esta zona —incluyendo las toallas higiénicas— puede influir directamente en su salud y comodidad.
Si durante tu período has sentido ardor, picazón, enrojecimiento o sensación de “ropa interior mojada”, no estás sola. Es más común de lo que se habla. Y muchas veces, no tiene que ver contigo, sino con los materiales que estás usando.
1. Fricción y humedad constante
Durante el período, la piel está más expuesta a roce y microlesiones.
Si la toalla no permite ventilación, la humedad se acumula y la piel se vuelve más vulnerable.
→ Humedad + calor = terreno ideal para irritación e incomodidad.
2. Fragancias y químicos añadidos
Algunas toallas convencionales incluyen:
- Perfumes
- Geles súper absorbentes (SAP)
- Blanqueadores y derivados del cloro
- Adhesivos y plásticos en la capa superior
Estos componentes pueden alterar el balance natural, generar dermatitis de contacto y afectar la microbiota vaginal.
Además, los Geles Súper Absorbentes generan una sensación de sequedad que hace que no sientas necesidad de cambiar la toallita cada 4 horas, que es lo recomendado.
3. Capa superficial de plástico
Muchas toallas tienen una capa que parece tela, pero es polipropileno o poliéster.
Este material no respira, por lo que acumula calor y humedad.
Eso puede favorecer:
- Irritación
- Mal olor
- Sobrecrecimiento de hongos
¿Cómo elegir una alternativa que cuide tu piel?
Busca productos que sean:
- Hipoalergénicos
- Sin fragancias
- Sin plásticos en contacto con la piel
- Respirables
- Con materiales certificados y de origen vegetal
El objetivo es respetar el equilibrio natural de la zona íntima.
La diferencia de usar materiales respirables
Cuando la piel puede ventilarse:
- Se reduce la sensación de calor y humedad
- Disminuye el riesgo de irritación
- La zona se siente más fresca y cómoda
- Se favorece un microbioma íntimo equilibrado
La experiencia cambia —mucho— incluso en el primer ciclo.
Cuándo consultar a un profesional
Si presentas:
- Irritación persistente por más de 72 horas
- Flujo con mal olor fuerte o color inusual
- Dolor o ardor intenso
- Síntomas recurrentes después de cada período
Es importante consultar con un/a ginecólogo/a para descartar dermatitis severa, hongos o vaginosis.
Un cuidado que acompaña tu ciclo
En Meness desarrollamos toallitas hipoalergénicas y biodegradables, hechas con materiales de origen natural y pensadas para respetar tu piel —sin fragancias, sin plástico y con alta respirabilidad.
🌿 Alivio real que se siente.
Experiencias de mujeres que cambiaron a toallitas hipoalergénicas Meness
“Me encantaron las toallitas. Súper suaves, cómodas, ni se sienten. No irritan y se nota que son hipoalergénicas. Anduve perfecto con mi flujo y sin tener que cambiarlas más seguido. Definitivamente me quedo con ellas.”
“Soy muy alérgica y tenía muchas complicaciones usando las toallitas tradicionales. Con Meness no me cambio: buen precio, buena calidad y sin molestias posteriores.”
“Con las toallas tradicionales me daba mucha picazón y alergia. Con Meness nada. Son súper cómodas y amigables con la piel.”
Conócelas aquí:
https://meness.cl/collections/toallas-higienicas